25 mar 2013

Siendo loco...

O "Las locas locuras de Loco McLocuaz"

Recientemente, me he estado topando mucho con la palabra "loco".

Esto ha venido mucho a colación por el proyecto/campaña publicitaria "Volvámonos locos" de la empresa Coca-Cola, pero eso es simplemente una campaña en favor de buenas acciones diarias, así como solo un sitio y una aplicación para smartphones, en lugar de una invitación hacia la anarquía y expresión última y máxima de nuestras libertades cómo individuos únicos dentro de un país independiente.

Por algún tiempo loco parecía ser una persona la cual era el alma de la fiesta, que mantenía a la gente riendo y no temía llegar a hacer el ridículo para poder hacer sentir todos mejor. Pero al mismo tiempo loco era esa persona que estaba sola la mayoría del tiempo, no hablaba con muchos y los únicos temas con los cuáles se podía hablar con él eran cosas sobre vídeo juegos o de series poco conocidas.

loco. adj.
- Que ha perdido la razón.
- De poco juicio, disparatado e imprudente. 
Diccionario de la Real Academia Española

Recuerdo haber escuchado cosas así cómo:
- Está bien loco, por eso lo amo.

Recuerdo muchas personas declarándose así mismas como personas locas y de actitud "random" pero al final del día lo único que recuerdo de ellas es que hablaban muy fuerte chistes verdes.

Una vez, una chica dentro de las áreas deportivas de la Universidad, fue acosada por su novio, el cual iba a pasar de las gradas, a las pistas de carreras. Después del incidente, más tarde dentro de ese día dijo:
- Suelo atraer a los locos.

Una vez platicando con una pequeña salió:
- Para mí significa ser diferente... o estar rodeada de gente muy normal.

Pero para esto debes de tener relativamente claro qué es normal y qué es ser diferente. Y todo esto se puede complicar cuando la gente suele usar indistintamente la palabra raro y loco.

Y es en estos días de alta comunicación y conexión a internet y redes sociales, que el uso de estos términos ha explotado exponencialmente en razón que lo hace la exposición a estas, con frases como "Tal persona es un loquillo", usado en un buen y mal sentido, y esa sensación que hace llevar a las personas jóvenes a revelar que nunca han sido normales y decir que se enorgullecen de su rareza, que ahora también parece significar que son especiales, así cómo que son geniales, al tiempo que están compartiendo una foto o vídeo de humores ácidos o de complicada abstracción.

Por ahora, solo trato de no enojarme con esa palabra y su uso, y no tomarme tan personalmente ese tipo de detalles. Es decir, solo es una palabra más y somos nosotros los que les damos el significado, las connotaciones, los momentos en cuáles usarla y cómo reaccionar ante ella.

Recuerdo una vez en mis meses iniciales de preparatoria, voltear a un pequeño grupo de gente, escuchando los últimos éxitos del aquél entonces artista nuevo mientras me acercaba a la puerta del laboratorio.
-Solo unos pequeños cambios en mi vida y hubiese terminado igual que ellos- me dije para mi mismo.
-Mira el pinche loco hablando solo.

La verdad es que en esos momentos me estaba extrañando más el hecho de que me había visto más a que haya dicho así.

18 mar 2013

Estar en una relación

Yo nunca había tenido antes una relación larga.

Hasta antes estar con una persona más de 3 meses parecía una idea descabellada al menos para mí. No por decir que siempre estaría solo o que soy incapaz de mantener una relación pero el punto era este:
La mayoría de la gente con la que estaba rodeado ya había tenido relaciones largas y duraderas o las estaban teniendo en el momento aún con el hecho de que todos compartíamos alrededor de la misma edad.

Aún sin embargo, parecía que sus vidas seguían de igual manera que la mía. Ambos comían, salían con sus amigos y estábamos haciendo las mismas tareas que todos.

Ya después de 1 año o más de ser las mismas personas y estar a lado de la misma persona, me preguntaba de qué rayos hallaban para platicar o para sorprenderse entre sí. Qué se llegaba a hacer cuando no se estaba en el cine, en una fiesta o en la casa de una tía que habían dejado sola durante el fin de semana.

Es decir, en una relación que inició en la escuela secundaria, y siguió hasta la preparatoria ahí son al menos 2  años creciendo juntos.

Al principio uno suele pensar que lógicamente todos crecemos igual, aprendiendo al mismo ritmo y conforme las cosas van llegando... pero sabes que la realidad es diferente en el momento en que para el segundo año un par de compañeros desaparecieron ya porque el chico tenía qué iniciar a trabajar para poder comenzar a pagar los gastos de su ahora abultada esposa.

Los chicos cuyas novias jugaban vídeo juegos parecían tenerlo sencillo.
Las parejas cuyos padres eran bastante liberales con ellos parecían tenerlo fácil.
Los chicos con dinero parecían hacerlo tan distante.
Y los chicos andróginos o irrazonablemente musculosos parecían hacerlo imposible.

A pesar de ello, tuve mis parejas o citas aquí y allá. Y de mis experiencias obtenidas y vistas puedo rescatar que no parece haber una fórmula para tener una relación o mantenerla... es algo que simplemente se da y ya.

Una relación es el resultado de la probabilidad estadística de la permutación de personas presentes, por la probabilidad de sus presentes en la multitud de sus pasados.

Lo que si puedo decir que al menos ha funcionado para mí, es una actitud de total miedo y  paranoia, en que cualquier paso que puedes dar es un botón para el desastre o un regreso a la casilla de inicio.

Si bien algunos pueden mirar esta visión como obsesiva o altamente dependiente y vacía, siempre preferiré estar así por sobre estar con una pareja por un par de años llenos de parches de meses de maldecirse el uno al otro.

De cualquier manera en la que esté nuestra relación y de todo lo que haya aprendido o no de este tipo de detalles, siempre me estaré preguntado de todos modos, ¿qué diablos hemos estado hablando ella y yo estos meses?